Embarazo Adolescente - Pinamar
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Embarazo Adolescente

Este es un tema que cotidianamente nos preocupa, nos ocupa. Y quienes hemos trabajado en este tema después de leer el libro de Ana Jusid, nos tenemos que replantear algunas cosas. Yo empecé a trabajar en esto en el año 70´ en la seguridad de que estaba en el buen camino, y el camino era analizar lo que, desde mi visión profesional, era el problema del embarazo adolescente. […] 
Porque desde la objetividad fría, desde la ciencia, podemos decir que en nuestro país la tasa del embarazo adolescente está en el 18-19 %, en algunos lugares estamos en 23 -24% y en aproximadamente un 26% en nuestra región. 

En Pinamar en el año 98 el Concejo Deliberante saco una resolución por la cual “teóricamente” tenemos servicios de planificación familiar en el hospital municipal, aunque todavía estamos con mucha dificultad para que la mayoría de las mujeres accedan a un método anticonceptivo sin que el médico las martirice…
Nos preguntamos ¿dónde en Pinamar un adolescente de 16 o 17 años que esta empezando a tener relaciones sexuales puede ir a consultar cómo cuidarse, quién les explica?
Todo esto hace a la mirada desde afuera pero de repente Ana, dice “ustedes los psicólogos, los sociólogos y los sexólogos, ven una parte del problema” y
nos muestra que detrás de estos números hay seres humanos, que son estas madres niñas, que muchas veces las olvidamos detrás de las cifras…

Así presentaba Luis Aller Atucha, dentro del ciclo “Pinamar en la Literatura”, a Ana Jusid y su libro “Cuadernos de la semilla”.

Ana Jusid es historiadora, tiene un postgrado en desarrollo urbano y regional, viene de “otros caminos” y en estos últimos años se ha dedicado a la escritura.
Ella cuenta que estos orígenes “disciplinarios” tiñeron su manera de mirar este fenómeno. 

En el año 84 colaboraba con el centro de desarrollos cristianos, dependiente de la iglesia metodista, allí funcionaba un grupo de estudios de la mujer y hacían falta ciertos datos de instituciones de madres solteras. 

Así, cargada de prejuicios, un día llega al hogar Amparo Maternal del barrio de Núñez: “cuando me iba acercando al hogar pensaba… católico, yo judía, vengo con una carta de la iglesia protestante… Fenómeno marginal, madres adolescentes, pobres, que tengo que ver yo? Monjas que deben hablar de pecado todo el día, eran un desastre todas en mi imaginación, para ellas la sexualidad era un cuco…  
Me habían pedido expresamente que no hablara mucho, que observara porque querían saber que estaba pasando en esas instituciones… Para mi era Marte, nunca hasta ese momento había ingresado el tema ni siquiera en mi léxico.” 
[…] “Después de dos horas de hablar con una de las monjas que trabajaban ahí adentro, yo ya no sabia ni quien era, se me habían venido abajo todas mis maestrías, mis post grados… mi manera de pensar el mundo.
” – confiesa Ana -

La imagen de una nena de 13 años con un bebe que arrastraba de la mano como un muñeco fue lo que la llevo a tomar la decisión de involucrarse.
Bien vestida, prolija, con anillito y pulserita de oro, rubia, había terminado la escuela primaria… llevaba a su hijo de la misma manera que las nenas chiquitas llevan a un muñeco.
Esta imagen fue la contrapartida a todos sus prejuicios. 
yo entre con una imagen y me fui con otra, y cuando salí del lugar, 3 o 4 horas después, llame al centro, hable con una persona y le dije… no me preguntes porque pero de este tema no me voy mas…”

Desprovista ya de toda arbitrariedad y ahora con cierta inocencia en el tema, fue como pudo compartir muchos momentos con las mamás que le relataron sus historias de vida.

Dentro de estas historias está la de Mónica, una chica que había sido repetidas veces violada por su padrastro, a Ana le maravilló su inteligencia, su capacidad expresiva, de decir cosas que nadie decía y expresar sus sentimientos como nadie los expresaba… su historia abre el libro y lo cierra 20 años después. 
Ella entrega a su hija en adopción después de haberla educado durante 2 años y medio, haberle enseñado a hablar, comer, caminar; porque se creyó sin condiciones para seguirla criando. 
No sabía como seguir adelante y la sociedad no le entregaba nada, su familia estaba bastante desquiciada y la sociedad también porque no le ofrecía nada.

Esta historia es una grave denuncia sobre las mamás adolescentes que son obligadas o deciden dar a sus hijos en adopción y después de darlos, quedan abandonadas, no reciben ningún tipo de contención. 

Actualmente han cambiado sólo algunas cosas en nuestra sociedad, la mayoría de los padres sabemos que nuestros hijos se inician en la actividad sexual más o menos a los 16 años.
Pero el libro de Ana Jusid hace un llamado de atención sobre lo que es la maternidad adolescente, en una sociedad que a pesar de todo sigue teniendo una doble moral; sabemos que nuestros hijos tienen relaciones sexuales, no nos ocupamos de que les llegue la información que necesitan y cuando falla alguna cosa, los señalamos con el dedo sin ver que, parte de lo que pasa con estas personas es porque la sociedad las ha abandonado. 

En el conjunto de las mamás adolescentes hay como mínimo un tercio que sí deseó el embarazo y el hijo o que una vez que quedaron embarazadas se decidieron por la maternidad.

Es importante cambiar un poco el eje de la mirada y tener en cuenta que las mamas no consiguen trabajo, el compañero las abandona, los hijos no terminan la escuela y todo esto no tiene que ver con el embarazo adolescente sino con que la sociedad es injusta. Si lo vamos a estar viendo todo el tiempo como una epidemia que nos va a contagiar a todos es difícil seguir pensando.

La información y la educación son un camino más pero desde cualquier lugar podemos trabajar para hacer una sociedad que sea más contenedora. 

La tarea de los educadores sexuales en una Argentina que todavía considera pecaminoso cuidarse, es una tarea importantísima y sobre todo dificilísima, porque en ciertos ámbitos pareciera normal y habitual utilizar métodos anticonceptivos y hablar de los hijos deseados y planificar la familia y en otros esta muy penalizado. 

El libro nos invita, al meternos en estas historias, a reflexionar, repensar y revisar desde nuestro lugar dentro de esta sociedad tan excluyente, tan cruel y tan dolorosamente indiferente.

El libro deja al costado las cifras para ingresar al lado mas humano…

Redacción dpinamar.com.ar
Viernes, 28 Agosto 2009

 

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